Fethiye a 9
de junio de 2020
Hemos pasado
una noche muy tranquila ya que hay muy poca gente. Es un pueblo
pequeñito y la
mayoría son hoteles y segundas viviendas.
Hemos
desayunado y nos hemos dado cuenta que se acaba la leche de Hava y que tenemos
que comprar la que viene en cartón. Ya le hemos enviado un mensaje a Çosku para
que solvente el problema y nos a contestado que ya la había enviado. Cómo le
vamos a echar de menos a nuestra segunda amatxo.
Hemos
comentado lo que íbamos a hacer mientras desayunábamos. Teníamos marcado unas
ruinas cercanas a Turunç que se llaman Amos. Hemos recogido todo y hemos salido
en dirección a Amos. Nada más llegar nos hemos dado cuenta que teníamos un
problema ya que no hay parking ni sitio para aparcar así que como no había más
la hemos dejado justo en la entrada a las ruinas.
No había nadie y esa es por
ahora nuestra ventaja.
Hemos
entrado a las ruinas y después de subir 186 escalones nos hemos encontrado que
queda poco más que un anfiteatro y unos pocos restos desperdigados por los
alrededores. No creemos que tengan muchos visitantes, aunque luego en el pueblo
nos han aclarado que suele haber mucha gente en verano. No sabemos dónde aparcarán,
aunque nos imaginamos que habrá autobuses hasta allí.
Las vistas
desde la colina son espectaculares y hemos sacado un buen número de ellas.
Nuestro
siguiente destino era Fethiye pero antes pasaríamos por Marmaris que a sido un
sitio de referencia para nosotros durante los dos meses de confinamiento.
Hemos
seguido camino a Fethiye. No había mucha circulación, pero entre los muchos
radares que coloca la policía turca, los pueblos que se atraviesan y que te
obligan a ir a 50km por hora al final se hacen los desplazamientos muy pesados.
Hemos
aparcado en un parking donde nos a sorprendido que hay aparcados autocaravanas,
caravanas incluso hay alguno que tiene el coche como vivienda. Nos a saludado
un señor turco que nos ha preguntado de dónde éramos, le hemos explicado y
luego nos a hecho la pregunta que nos persigue desde hace tiempo. ¿Cuánto tiempo
lleváis en Turquía?. Nos lo pregunta todo el mundo ya que se sorprenden de que
haya extranjeros después del coronavirus. Piensan que todos salimos antes del
confinamiento así que pasamos todos los días un buen tiempo en explicar de
dónde somos y cuanto tiempo llevamos en Turquía.
Hemos salido
hacia la parte vieja de Fethiye que es dónde comienza la subida hasta las
Tumbas Licias. Hacía mucho calor y en uno de los termómetros que hemos visto
marcaba 31º. Hay un paseo que bordea buena parte de la bahía y en una de sus
terrazas nos hemos sentado a tomar una cerveza para refrescarnos.
Hemos
llegado hasta la entrada de las Tumbas no sin antes subir un par de buenas
cuestas y 60 escaleras.
Hemos sacado las entradas y comenzado a subir las otras
186 escaleras que te suben hasta la entrada antigua que por cierto algunos
desalmados han pintado a spray y está indecente.
Ya podrían limpiarla un poco.
Hemos recorrido los diferentes sitios y al salir hemos fotografiado otra parte
de las tumbas que no se ve cuando subes a la central.
Nos hemos
recorrido buena parte del casco antiguo que también está bastante abandonado y
hemos puesto dirección al mercado. Lo primero que hemos visto es que las
pescaderías te preparan el pescado que tu eliges y te lo hacen en los
restaurantes que hay alrededor. Lo mismo pasa con la carne, pero ésta hay que
comprarla en distintas carnicerías que hay alrededor del mercado.
Ya era tarde
así que hemos buscado un sitio para comer. Hemos elegido un Kebab ya que no
teníamos mucha hambre, además de que ya eran las 16,30h. Hemos visto gente
pescando y nos hemos acercado a mirar un poco.
Mientras estábamos viendo como
pescaban se ha visto a una tortuga que merodeaba por la zona y a estado un buen
rato dando vueltas cerca de donde estábamos.
Después de
comer y dar un paseo por el bazar dónde la mayoría de las tiendas están
cerradas y cuando volvíamos para casa hemos pensado que podíamos buscar otro
sitio para dormir ya que estábamos cerca de una carretera y se veía que había
mucho tráfico además de que no se movía el aire y hacía un calor de muerte.
Hemos buscado otro sitio y nos hemos encontrado con una zona al lado de la playa
dónde corre el aire y se está de “cine”.
Bueno a
descansar y mañana será otro día. Portaros bien.
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